Ir al contenido principal

Hormonodependiente


Fisiopatología
Las células tumorales presentan receptores de hormonas esteroides (estrógenos y progesterona) y la presencia de estas hormonas es crucial para el crecimiento normal de la mama, tumorogénesis y progresión del cáncer.

Los receptores hormonales que se sitúan en la membrana celular, al interaccionar con el estrógeno, activa vías de señalización intracelulares como IP3 quinasa o MAPK, que se transloca al núcleo, activando mecanismos de proliferación. En células normales, los receptores ER (estrogen receptor, RE en sus siglas en castellano) se degradan vía UPS (ubiquitous-proteasome system) para mantener el balance celular de receptores en frente a estímulos hormonales, en las células tumorales por un desequilibrio se aumenta su actividad y se prolonga su activación. Además, el RE funciona formand homodímeros y así activando la transcripción de genes. El RP (receptor de progesterona) actúa de la manera similar y consta de los mismos dominios. En el tumor los niveles de la aromatasa y los de estrógenos están elevados. Por lo tanto, este tipo de cánceres son RE+ y Her2+ o Her2-.

Tratamiento
La hormonoterapia en estadios más leves está centrada en reducir los niveles de estrógeno y progesterona que circulan en la sangre o reducir su capacidad de unión a la célula tumoral.

  • Moduladores selectivos de los receptores de estrógenos como el Tamoxifeno. Bloquea los efectos de esta hormona en el tejido mamario y que reduce las señales de crecimiento. Actualmente es de uso de primera línea
  • Inhibidores de la aromatasa como el Anastrozol. Bloquea la vía de producción de estrógeno por la vía suprarrenal, encargada de transformar los andrógenos. Aun así, estos medicamentos no pueden impedir que los ovarios continúen produciendo estrógeno, por lo tanto, se acostumbra a dar en pacientes post-menopáusicas y como terapia complementaria en mujeres pre-menopáusicas.
  • Hormona liberadora de hormona luteinizante produce una elevación por parte de la adenohipófisis de hormona luteinizante que a su vez reduce la producción de estrógenos por parte de los ovarios. Intenta imitar el efecto sobre el estrógeno de una secreción excesiva de LH en la ovulación.

En estadios más avanzados tradicionalmente se ha tratado con Fulvestrant, un antagonista de los receptores de estrógeno del tejido mamario que impide la unión del estrógeno en las células mamarias. Una terapia reciente combinada entre Fulvestrant y Palbociclib, un fármaco quimioterápico dirigido que inhibe las acciones de las cdk4 y cdk6. Estas ciclinas son las encargadas de promover el avance de la fase G1 a la fase S el ciclo celular y son activadas por muchos estímulos oncogénicos. Este estudio ha probado que al combinar estas dos terapias se reduce el riesgo de recidiva, disminuye el ritmo de crecimiento del tumor y metástasis y aumenta considerablemente la calidad de vida de las pacientes, aunque se han observado frecuentes efectos secundarios como neutropenia, leucopenia, fatiga y náuseas.

Comentarios